Hallux valgus: la alteración estructural más frecuente del primer radio

El hallux abductus valgus es una deformidad que afecta a la articulación metatarsofalángica del primer radio del pie, así como a los sesamoideos y el primer dedo. Se caracteriza por el distanciamiento del primer dedo respecto al eje medial de nuestro cuerpo y por una rotación en valgo. Esto provoca una luxación de la articulación metatarsofalángica, afectando a ligamentos, cápsula articular, sesamoideos y músculos. En casos graves hay rotación del metatarsiano, desplazamiento del rodete glenosesamoideo y de algunos tendones. El tendón del abductor queda posicionado plantarmente, el extensor se desplaza formando una cuerda de arco y el tendón del flexor largo y corto también se redistribuyen.

Denominamos juanete a la prominencia ósea o al aumento del tamaño de la articulación metatarsofalángica del primer radio (por inflamación, artritis, bursitis, etc.). Las causas pueden ser hereditarias o adquiridas. Respecto a las causas hereditarias pensemos que la morfología del pie se hereda (el hallux valgus es autosómico dominante). Se presenta como un hallux valgus juvenil o morfológico. El juvenil, como su nombre indica, aparece a temprana edad mientras que la herencia morfológica de los huesos, favorecerá la aparición del hallux valgus. En la morfología del hueso desempeñan un papel importante la longitud del primer dedo, la forma de la primera cuña y la forma de la cabeza metatarsal.

Las causas adquiridas dependen de diversos factores:

• Factores sociales: el uso del calzado con puntera estrecha o tacones altos.
• Factores biomecánicos como la pronación del antepié el pie plano, pie equino, dinámicas abductoras o adductoras, primer radio hipermóvil, etc.
• Factores traumáticos: antecedentes de esguinces y fracturas. Factores reumáticos: por procesos inflamatorios de la articulación.
• Amputaciones: la falta de dedos centrales puede deformar los dedos contiguos.
• Factores hormonales: el aumento de relaxina durante el embarazo puede favorecer el desarrollo del hallux.
• Quistes: los quistes sinoviales debilitan la cápsula articular.

En los casos de hallux valgus juvenil existen diferentes causas tales como hereditarias, biomecánicas y de diverso índole (paralisis cerebral, alteraciones neurológicas, desequilibrio muscular intrínseco, etc.). El tratamiento del hallux valgus puede ser conservador o quirúrgico dependiendo específicamente del caso. Se recomienda el uso de un tratamiento conservador en aquellos pacientes que no presentan dolor con frecuencia o cierta intensidad a excepción de casos en que el hallux valgus esté estrechamente relacionado con artrosis severa, metatarsalgias o alteraciones biomecánicas de rodilla y cadera. Hay que evitar el uso de la cirugía como tratamiento estético. El tratamiento conservador previene el aumento del hallux valgus mediante fisioterapia y «soportes plantares» estabilizadores.

El uso de la cirugía como tratamiento de elección es básico cuando las molestias que provoca el hallux valgus son frecuentes o incapacitantes para una buena deambulación. Es muy importante el planteamiento de la técnica quirúrgica más adecuada al caso. Debemos tener en cuenta que existen más de un centenar de técnicas quirúrgicas de hallux valgus, por lo cual, es importante valorar parámetros tan básicos como la movilidad del primer radio, la exploración biomecánica y la valoración radiológica.